Un domingo de colas en las estaciones de esquí y carreteras andorranas
Cola accesos al telesilla Pic Blanc de Grau Roig domingo al mediodía (Foto: particular).
El mes de febrero de 2018 podría pasar a ser histórico en las estaciones de esquí. Y no solo el mes de febrero, quizás lo sea también toda la temporada. No es una afirmación nuestra, sino que hace sólo unos días salió de la boca del director de una estación francesa del Pirineo. Y este domingo hemos visto y vivido algunas de las consecuencias de este febrero que va camino de superar todos los récords.
Un domingo de finales de febrero, con mucha nieve en pistas, sol y temperaturas agradables no puede más que sinónimo de estaciones de esquí llenas de visitantes. O sea, muchos esquiadores deslizándose por pistas y por supuesto remontes subiendo con las sillas llenas. En esta coyuntura es normal que las estaciones de esquí del Pirineo lo llenen todo (pistas, remontes, parkings, terrazas, bares, restaurantes, hoteles, alquileres…), pero lo cierto es que ya llevamos unos cuantos fines de semana en los cuáles las estaciones están recibiendo muchas más visitas que en los meses de febrero de temporadas precedentes. Algo, en positivo, se está moviendo en el sector. La temporada, por lo que sabemos y nos está llegando por diferentes fuentes -oficiales y no oficiales-, puede acabar convirtiéndose en histórica por el número de esquiadores en pistas. Pero eso, claro, tiene otras repercusiones.
Cola de coches prácticamente parados en el Túnel de la Tàpia, en Sant Julià de Llòria, Andorra (Foto: Ivan Sanz).
Si hace unos días nos fijábamos con los colapsos en el Túnel del Cadí, hoy lo hacemos con la frontera andorrana en Sant Julià de Llòria. Las colas a las 6 de la tarde se alargaban hasta más allá de la entrada norte del casco urbano, en concreto y como punto de referencia, podemos decir que casi llegaba hasta el frente de la actual "casa del formatge", en el núcleo-polígono conocido como la Margineda, más allá de la entrada norte del casco urbano de Sant Julià de Llòria. Es decir, una cola de casi 8 kilómetros de circulación lenta y pesada, durante algunos ratos parados, hasta la frontera de la Farga de Moles.
Cola en los accesos al telesilla del Cubil de Grau Roig hoy al mediodía (Foto Lugares de Nieve).
La gran afluencia de esquiadores en Grandvalira este domingo ha sido una evidencia y no sería raro que en esta jornada se hayan superado récords en la expedición de forfaits de esquí. Algunos esquiadores se han hecho eco, publicando fotos en las redes sociales con colas para acceder a los telesillas, en especial los que figuran como ejes centrales de comunicación entre sectores del dominio, como el Pic Blanc de Grau Roig o el de Cubil. Según algunos esquiadores habituales del gran dominio andorrano el tiempo de espera ha llegado a los 20 minutos en las horas centrales del domingo, aunque la situación de colapso también ha sido motivada por la avería puntual del telesilla Antenes que ha condicionado la circulación de esquiadores entre sectores, haciendo de Grau Roig el punto más afectado.
Cola de vehículos para salir de Andorra este domingo tarde (Ivan Sanz).
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