Buena parte de Europa ha visto estos últimos días como regresaba el frío, la nieve y el viento y es que un frente polar procedente del Ártico, inusual para esta época del año, acompañado de temperaturas muy bajas para la época se ha desplazado hacia el sur. Debido a ello las temperaturas bajaron generalmente en al menos 10°C de un día para el otro.

Desde el viernes pasado y durante varios días, ha caído nieve -y en abundancia- en los Países Bajos, Francia, Alemania, Suiza, Rumanía, Bulgaria, Italia e incluso Grecia. También ha nevado en las cotas altas de los Pirineos, que han dejado un paisaje más blanco esta primavera de lo que estaba en diciembre.

Así, las temperaturas del 3 al 7 de mayo han sido mucho más bajas de lo normal para esta época del año, se han rozado o batido récors de mínimas para un mes de mayo en las últimas décadas, con heladas muy severas por la mañana en muchas partes del este, centro, oeste de Europa y la península de los Balcanes. Para poner un ejemplo, en los Pirineos se ha llegado a -18,3C en la Pica d'Estats.

Las previsiones del portal meteorológico Severe Wather apuntan que el viejo continente todavía deberá esperar para recuperar la primavera, ya que en los próximos días se esperan períodos lluviosos en algunas áreas.

A partir del fin de semana nuevamente se establece un patrón frío para Europa central y en parte también para el Mediterráneo. El clima cálido de primavera se pospone por al menos otra semana.

Extensas zonas de Italia combaten las fuertes heladas en viñedos con fuentes de calor (braseros) durante varios días. Ato Adige. Valle Isarco, Bressanone. Fuente Inmeteo.it

En Vijlen, Países Bajos, la a última vez que hubo nieve fue a principios de mayo aquí fue en 1979...y hasta ahora. O en Grecia, donde este principio de mayo se acumulan estos espesores.

Y esto es Italia, a sólo 1.100 metros de altitud este lunes.

El lunes en Calarsi, Rumania.

El lago Morlich en Escocia.