Pero antes de todo, hagamos un poco de pedagogía de las siglas para entender bien como está repartido el mercado del esquí en Andorra, para valorar lo estratégico de este último movimiento. 

 

 

Veamos que significan todas estas siglas y marcas dentro del sector de la nieve en Andorra.

SAETDE, SECONOA, ENSISA, EMAP, NEVASA, Grandvalira, Vallnord, Esquí Andorra. 

 

 

Claramente y desde hace unos años se ha iniciado una concentración total de los sectores-marcas del país; Este movimiento es un avance más en esta consolidación de marca única que tanto planea en el imaginario andorrano de “el pais de la neu”, algo que no será tan fácil de conseguir como parece a simple vista. 

 

El primer punto para considerar, es la pugna interna entre sociedades que representan los diferentes sectores para ver quien tiene el control, basado en ciertos factores como los días de esquí proporcionados al total de “ski days” del país.

 

Esta variable permite materializar en números un control interno que actualmente genera una competición entre las dos sociedades principales de Grandvalira NEVASA; Soldeu el Tarter vs Pas Grau o lo que es lo mismo ENSISA vs SAETDE, una pugna por los días de esquí que existe desde hace años, desequilibrada ahora con la compra de Ordino Arcalis SECNOA, por parte de SAETDE Pas de la Casa Grau Roig.  
 

Bien, antes de que perdamos el hilo, no olvidemos que el horizonte de una sola marca seria en beneficio del esquiador y la variedad a la hora de escoger sectores; para consolidar los dos millones y medio de días de esquí que representan una cifra aceptable para la que podríamos denominar, con permiso de la banca, la primera industria o sector económico del país, complementado con sus correspondientes noches de alojamiento y derivadas en restauración/comercio. 

 

 

 

Esto lo iremos conociendo en los correspondientes episodios que irán llegando en los próximos meses, puesto que como hemos apuntado, este movimiento es simplemente el inicio de uno que generará unas dinámicas mucho mayores. Lo que si podemos asegurar es que cambiará el mapa del esquí, no solo en Andorra, sino también en el Pirineo y Europa. 

 

Incluso nos podríamos aventurar a afirmar, que podría influir en el mercado mundial del sector, ya que 2,5 millones de días de esquí son merecedores de poner la operación en el mapa del esquí mundial, incluido el norteamericano; pero este es un segundo capítulo que ya analizaremos en otro artículo