La principal actuación gira en torno a eliminar los vehículos de los últimos kilómetros de la carretera entre la cota 1.985, base del telesilla Enric Planella, y el aparcamiento del Pla de Morens, a 2.160 m. De momento es un anteproyecto. Pero hay más cosas.

 

En sus inicios la estación de esquí de Vallter 2000 no estaba planificada tal como la conocemos hoy en día. Poco antes de su apertura, en 1974, el equipo de ingenieros de SETAM, empresa especializada en la redacción de proyectos de estaciones de esquí con base en Grenoble, había redactado un proyecto de estación de esquí para Vallter con la previsión de que la carretera de acceso finalizara cerca del Pla de l'Hospitalet.

 

 

A tocar de esta planicie es donde hoy encontramos la base del telesilla Enric Planella y el refugio-hostal Pastuira. Era en esta zona donde los redactores habían previsto ubicar los servicios generales de la estación. Es decir, el pie de pista único y principal, y no los dos que tiene actualmente.

 

Los impulsores de la estación setcasina, sin embargo, prefirieron ubicar los servicios y las edificaciones pie de pista en la cota 2.160 m, en el Pla de Morens. Esta era, y es, una zona más soleada, con buenas panorámicas y posiblemente más acogedora a primera vista. Pero también más expuesta al viento. Esto obligó a hacer una carretera más larga de lo previsto en el redactado inicial. Así pues, la carretera proyectada en su momento se debió polongar con un tramo suplementario de 2,5 kilómetros y de esta manera es como sube ahora hasta la cota 2.160 del Pla de Morens.

 

 

 

Ahora, cuarenta y cinco años más tarde, los responsables de Vallter 2000, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya como accionista mayoritario de la Sociedad Vallter SA, plantean que la estación vuelva, en cierto modo, a sus orígenes. El objetivo no es otra que sacar los coches del Pla de Morens y ahorrar a los visitantes que suben a la estación la circulación de este tramo final de la C-771 de 2,5 km, conocido por sus cerradas curvas.

 

Será, también, un gesto bastante importante de cara a la protección y respeto medioambiental de Vallter con la zona. Con la creación en 2015 del Parque Natural de las Cabeceras del Ter y el Freser, Hoy Vallter es una isla en el perímetro del parque.

 

 

 

El primer anteproyecto -pendiente del consenso con el territorio- que se redactará para hacer posible este nuevo Vallter prevé, según el pliego técnico, que los clientes que lleguen al nuevo pie de pistas de la estación encuentren un nuevo aparcamiento sobre el que habrá el edificio principal de servicios. Unos servicios que deberán incluir actividades tales como restauración, tienda, alquiler, sanitarios o servicios técnicos propios de la estación.

 

El nuevo edificio "pie de pista" deberá estar integrado paisajísticamente en el entorno y en la parte baja, o planta cero, habrá el aparcamiento con capacidad para 1.000 plazas. Las mismas que se suprimirán en el Pla de Morens. Las actuales 3 plataformas de estacionamiento de la zona de Morens serán eliminadas de sus funciones y restauradas paisajísticamente. En cuanto a la revirada carretera, ésta será sustituida por área esquiable.

 

 

 

También habría cambios en el sector de la Xemeneia. El actual telesquí del mismo nombre y las dos pistas a las que da acceso, la pista Xemeneies y la pista Font Perdiu, desaparecen. Estos dos trazados, de dificultad roja y azul, serán restaurados paisajísticamente. El remonte será retirado y la zona será integrada en el Parque Natural de las Cabeceras del Ter y el Freser.

 

 

Y finalmente la última novedad importante que prevé el anteproyecto es la sustitución del viejo telesilla Enric Planella, ubicado al final de la pista El Xalet desde el año 1978. Este remonte será retirado definitivamente y en su lugar se instalará un telesilla de nueva generación, con más capacidad y con menos gasto energético. 

 

 

 

 

Pues de momento, y como señalado anteriormente, se trata de un anteproyecto. Según responsables de Vallter SA y FGC (Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya) que han sido consultados por el Diaridelaneu, ahora hay que valorar diversas cuestiones al respecto. Y luego se deberá volver a consensuar con el territorio.

 

Nadie se atreve a confirmar o poner fechas, y es que los responsables han dejado claro que sólo es un primer paso. Está claro, sin embargo, que una vez se arranca el paso más importante está hecho. Un punto de partida necesario para plantear un "nuevo Vallter" que proyecta su futuro mirando atrás, volviendo a los orígenes.