Autenticidad, biodiversidad, patrimonio, Ski & Spa y nieve en mayúsculas son algunos de los puntos que tienen en común las estaciones símbolo. Poco conocidas y más cerca de lo que te imaginas, hay cinco destinos de nieve espectaculares.
 

 

 

Cada una es única y cuenta con algo insuperable. Hablamos de Cauterets, Gavarnie, Grand Tourmalet Pic du Midi, Peyragudes y Saint Lary, 5 emblemáticas estaciones del Pirineo francés.

 

 

 

En el corazón del Parque Nacional de los Pirineos y flanqueada por los dominios de nieve del Cirque du Lys y Pont d’Espagne se esconde el símbolo más elegante del Pirineo francés: Cauterets. La estación más alpina de los Altos Pirineos se halla entre 1.450 y 2.450 m de altitud y está rodeada de altas montañas, cascadas y lagos (Estom y Gaube), y maravillosas vistas a la cumbre del Vignemale y su glaciar.
 

 

 

 

Meca de los freestylers. Cirque du Lys alberga el primer parque de freestyle de Europa, situado en la cara este, a 2100 m de altitud.

 

Como contrapartida, el Pont d’Espagne, conocido como el pequeño Canadá y “Grand Site des Midi-Pyrénées”, es un dominio más familiar y esta temporada estrena el Cauterets Fun Park, un espacio con tres áreas de juego, slalom, zona JIB y parcour. 

 

Las típicas callejuelas y los edificios Belle Epoque como el “Gran Hotel de Inglaterra”, el “Gran Hotel Continental” o el “Balneario de Cauterets” (éste último contó con ilustres invitados como Napoleón III, Víctor Hugo o el fundador de la literatura romántica en Francia, François-René de Chateaubriand) atesoran el rico legado histórico de Cauterets. 
 

 

 

Desde el siglo XII, el dominio se vincula a las aguas termales, ricas en oligoelementos y sílice que emanan a una temperatura comprendida entre 45 y 60o C. El centro termal “Le Jardin des Bains”, con 2.500 m2 dedicados al cuidado y a la relajación, se integra perfectamente a la naturaleza y contribuye a hacer de Cauterets uno de los templos del Ski & Spa en los Pirineos.

 

Precisamente de esta tradición termal nació en el siglo XIX, el berlingot. Esta especialidad de Cauterets consiste en el famoso caramelo de colores que antaño utilizaban los agüistas para reducir el sabor del agua sulfurada y que, hoy en día, se sigue elaborando de forma artesanal.

 

 

 

Cuenta la leyenda que la brecha divina fue abierta por el sobrino de Carlomagno, Roland, al tratar de destruir su espada golpeándola contra la roca al finalizar la batalla de Roncesvalles. El Valle de Gavarnie -la barrera rocosa fronteriza con España-, es un dominio de nieve y montaña fuera de lo común y el más legendario de los Pirineos, declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO en el año 1997, con cimas tan emblemáticas como el Pic du Midi, o el Pic du Midi d’Ossau.
 

 

 

A 55 kilómetros de Lourdes, en pleno Parque Nacional de los Pirineos, se halla Gavarnie-Gédre, el dominio de la brecha divina, cuna del pireneísmo y patria de los más ilustres guías pirenaicos. Esquiar aquí es una de las experiencias más conmovedoras.

 

El circo glacial de Gavarnie es un altar a lo sublime formado en la era cuaternaria hace unos 2 millones de años, desde donde puedes contemplar la mayor cascada de Europa (427 m) y las increíbles formaciones calcáreas naturales de los circos naturales de Gavarnie, Estaube y Troumouse.

 

Con 52 Km y 29 pistas, es un dominio perfecto para la práctica del esquí alpino, de fondo o de travesía, raquetas de nieve, trineo, o actividades lúdicas como vías ferratas, escalada en cascadas o patinaje sobre hielo. También es una estación familiar, pues cuenta con la pista verde más larga de los Pirineos.

 

Aquí se encuentra el Kid Park, el entorno ideal para principiantes y niños. Además, la autenticidad de los pueblos de montaña, donde la actividad pastoril marca el ritmo de lo cotidiano, es otra de las razones por las que visitar los pueblos de Gavarnie (a 1.375 metros de altitud) y Gédre, una verdadera obra de arte. 
 

 

 

 

 

Con casi 300 hectáreas de laderas cubiertas de nieve, más de 100 Km de descenso, 69 pistas y 34 remontes que culminan a 2.500 metros de altura, Grand Tourmalet Pic du Midi es, sin duda, la joya de los Pirineos franceses.

 

Los amantes del deslizamiento hallan a ambos lados del mítico Col du Tourmalet (2.115 m) y Grand Tourmalet (Barèges-La Mongie), el área más extensa y dos estaciones en una, de ambiente y estilo contrastado.
 

 

 

En el lado este del Col du Tourmalet, La Mongie es el auténtico paraíso del freeride. Localizado a 1.800 m sobre el nivel del mar, el dominio esquiable ofrece un inmejorable ambiente de montaña y permite salir con los esquís desde casa. En Artigues “Coume Peak”, los freeriders cuentan con 1700 m de desnivel en una pista de 10 km de descenso y, a partir de esta temporada, con el descenso del “Tour de France”, creado 108 años después de que el ciclista francés, Octave Lapize, coronara por primera vez la cima del Tourmalet en 1910. Así, la conocida “montaña del mal retorno” se ha convertido en todo un símbolo de desafío para esquiadores y snowboarders.

 

El área de freeride del Pic du Midi, única en los Pirineos es una de las más esperadas por las fans del freeride cada temporada; suigiendo la línea de las míticas Aiguille du Midi, en Chamonix; o a La Grave, en los Alpes. Desde su cima a 2.877 m, se ofrecen dos descensos. El itinerario "Coume du Pic" que va de La Mongie a Artigues-Campan, tiene una diferencia de altitud de 1.700 m y 10 km de descenso. Un servicio de transporte gratuito sube a los esquiadores al pie de las pistas.

 

El otro itinerario es la vertiente de Barèges, al lado del telesilla Tourmalet, el forfait Pic du Midi Unlimited incluye el regreso a través de este ascensor.

 

 

El estilo opuesto de la ladera oeste del Pic du Midi, Barèges revela el encanto y la autenticidad de un pueblo de montaña, situado a 1.250 m sobre el nivel del mar; con graneros y casetas de pastores, a base de madera y pizarra; pistas que recorren el bosque; y, hasta tres restaurantes de altura.

 

El Paso del Tourmalet y Ayré son visitas más que recomendables junto a otras maravillas como los descensos de freeride del Pic du Midi de Bigorre; el Parque de las estrellas; el del Pic du Midi por la vertiente de Barèges; o el Hyper Belbévère del Pic du Midi, una nueva pasarela metálica de 10 m de largo, suspendida a 2.877 metros de altura cuya vista se extiende 300 kilómetros sobre los Pirineos.

 

Desde esta temporada, si tienes entre 13 y 18 años, y cuentas con un excelente nivel de esquí o snowboard puedes apuntarte al Ados Riders. Cuatro guías especializados en el descenso de freeride del Pic du Midi te acompañarán en tus fuera pistas. Todos los días durante las vacaciones escolares francesas (del 23/12/18 al 28/01/19 y del 10/02/19 al 5/03/19), de las 13h a las 18h.

 

Los expertos te mostrarán los parámetros relacionados con la práctica del freeride: esquiar sobre nieve virgen, evaluar el manto de nieve, servir como un ARVA e, incluso, lo que debes hacer en caso de mayor riesgo.

 

 

El Ski & Spa también está presente en Grand Tourmalet Pic du Midi. Los centros termales de Bagnères de Bigorre y Barèges son construcciones con mármol de los Pirineos construidos a principios del siglo y rodeados de espacios naturales. Sus aguas termales brollan a más de 50º y son ricas en calcio y sulfato de magnesio. Es el caso del prestigioso centro termal “Aquensis”, en la localidad de Bagnères de Bigorre; o, el balneario de Barèges muy famoso desde principios del siglo XVII, por ser el más elevado de los Pirineos.

 

 

 

Esta temporada, la estación estrella de los Pirineos Centrales cumple 30 inviernos; y, a diferencia, de lo que ocurre en los Alpes ha sido preservada del impacto visual para mantener la autenticidad de su valle. En marzo de 2015 fue la primera área de esquí francesa en obtener la certificación ISO 50001 (gestión energética).
 

 

 

La estación de James Bond (aquí se rodó “El mañana nunca muere”), es uno de los dominios de nieve y montaña más jóvenes y modernos de los Pirineos. Es célebre por ser el punto de llegada del Tour de Francia; así como por contar con el recién renovado altipuerto 007, único en los Pirineos.

 

Peyragudes está rodeada de picos increíbles de hasta 3000 metros de altura; por la región de la Alta Garona, por un lado; y, Altos Pirineos, por otro. Cuenta con tres Freestyle Spaces, 51 pistas de esquí y las últimas tecnologías aplicadas al sector de la nieve: ascensores ultrarrápidos, red de información digital y wifi en las pistas, zonas de video, sistema Snowsat, máquina de nieve híbrida, etc. Además, esta temporada ha inaugurado el primer Pumptrack de los Pirineos, situado a pie de pistas de Sérias, en la vertiente de Peyresourde y delante de las terrazas de los restaurantes de Peyragudes. 
 

 

 

Es también una estación de nieve familiar, acreditada con el sello de calidad “Famille +”; lo que certifica que ofrece un trato personalizado y profesional a las familias; que cuenta con actividades específicas para los más pequeños, tanto individuales como conjuntas; con tarifas reducidas según la edad; y, servicio médico de proximidad.

 

Por su parte, los centros termales Balnéa y Spassio, son algunos de los espacios Ski & Spa más bonitos de los Pirineos donde disfrutar de un relajante baño musical bajo las estrellas. El Spassio situado a pie de pistas y con una bella arquitectura de grandes ventanales, ofrece impresionantes vistas a los Pirineos.

 

 

 

Conocida por la belleza y autenticidad de sus pueblos (Vignec, Soulan y Tramezaygues), Saint-Lary es uno de los destinos de nieve más top de Europa. Situado a tan solo 20 km de la frontera española, en las puertas del Parque Nacional de los Pirineos y de la Reserva Natural de Néouvielle, cuenta con 30.000 alojamientos turísticos y restaurantes de calidad, 100 km de pistas y 700 hectáreas en pleno corazón del Valle de Aure.

 

 

 

Los esquiadores más extremos hallan, en cambio, lo que los expertos consideran uno de los mejores fuera pista del momento. La estación ofrece el esquí fuera pista “magic spot” que permite vivir sensaciones insólitas en pasarelas y pequeños valles olvidados, remontados por telesillas, con esquís o a pie. También es la cuna del freeride, por sus increíbles pendientes vírgenes envueltas de mantos blancos. En el sector de Espiaube, el lugar ideal para la práctica del speed riding, a los esquiadores más extremos se les permite jugar con la gravedad.

 

Y, es que Saint-Lary lo tiene todo tanto si esquías como si no. Es la cumbre del bienestar y la meca del Ski & Spa. Creado a partir de la reconstrucción de un cañón auténtico, el Sensoria Rio es uno de los mejores centros termales de los Pirineos franceses. Su agua de manantial natural brolla a 32ºC en els jacuzzis, cascadas, géisers y río a contracorriente. También dispone de cueva, sauna y baño turco.
 

 

 

Los copos pirenaicos, el cerdo negro de Bigorre u otros productos del terruño, además del auténtico queso de oveja del Valle de Aure son algunas de las especialidades que puedes degustar en Saint-Lary. Aquí puedes visitar al chocolatero artesano más famoso de los Pirineos, una de las tentaciones más irresistibles de Saint-Lary.

 

En la población de Vignec, hay una conservera natural dirigida por la familia Coustalat que hace más de veinte años que transforma los productos del terruño. Y, todos los días, de las 17 a las 18.00 h, Francis Porte abre su granja para dar a conocer el tome, el azul y el Petit d’Ens, sus tres especialidades artesanales de queso de oveja.

 

 

 

 

Más información en http://es.lespyrenees.net/