La primera y única medalla de oro olímpica de esquí cumple 45 años: Paquito Fernández-Ochoa
Fotomontaje imagen revista Hola 1972 e imagen de R. Cases para El Mundo en una de las últimas entrevistas a Paquito
Mon, 13/02/2017 - 13:38
Hasta aquél día, el esquí español era un auténtico desconocido. Hoy hace 45 años, un madrileño afincado en la localidad serrana de Cercedilla, lo dio a conocer en España al ganar, en una genial e insuperada gesta, la medalla de oro de Slalom en unos Juegos Olímpicos de Invierno. Era en Sapporo en 1972
Hace hoy 45 años, ocurría una de las más grandes gestas internacionales del deporte español; inédita e inesperada, si tenemos en cuenta de que hasta entonces, el esquí alpino en nuestro país apenas sí contaba con algunos seguidores: un madrileño afincado en la localidad serrana de Cercedilla desconocido hasta ese momento, Francisco Fernández-Ochoa, conseguía en Sapporo (Japón) la primera y única medalla de oro en unos Juegos Olímpicos de Invierno. Era el 13 de febrero del año 1972.
En un golpe genial, Paquito, con una "garra" y esfuerzo que hizo suyos durante toda su vida, el extraordinario corredor, de la noche a la mañana se convirtió en el héroe (el "Régimen" de aquella época lo explotó como una victoria nacional) de un deporte que para pocos existía pero que el país hizo suyo al instante de conocer la noticia. Todos ganamos aquel día el oro de Japón.
Paquito celebra con su hermana Blanca los triunfos de la gran campeona española de esquí. Imagen de archivo
Organizada por "Rober" Puente hace tan solo unos meses, los deportes de nieve españoles y muchos de sus representantes, instituciones como RFEDI, deportistas de ayer y de hoy, medios de comunicación y aficionados nos reunimos en torno a su familia en Madrid SnowZone en una emocionante Gala en memoria del 10º aniversario de la muerte del genial esquiador y mejor persona. Hoy, celebramos los 45 años de aquella victoria que despertó en muchos, empezando por el que os habla, las ganas de esquiar y el placer de hacerlo.
El primero en triunfar en una saga familiar con nombres históricos como los de sus hermanos Juan Manuel y Ricardo, también olímpicos, y que culminaba 20 años después, dentro de una semana se cumplirán 25 años, con el bronce de Blanca Fernández-Ochoa en los Juegos Olímpicos de Albertville 1992. Dos hazañas que hasta hoy no han sido igualadas.