Se acercan puentes, vacaciones, días calurosos en las ciudades y en la playa y las propuestas de sitios diferentes y menos cálidos van ganando adeptos tanto entre el público familiar, como los singles,o entre los grupos de amigos.

 

Turismo activo es sinónimo de salud, de querer conocer un poco más allá de lo meramente conocido por todos, de viajar de una forma diferente.

 

 

 

El proyecto Bus Turístic de Andorra, se inició en 2009, con una reconducción del concepto en 2014, para ir mejorándolo cada año hasta llegar a 2017 gracias a las encuestas que los usuarios pueden rellenar en acabar el recorrido.

 

Con salidas 7 días por semana entre el 1 de junio y el 31 de octubre, el Bus Turístic de Andorra quiere ser la propuesta de turismo activo para todo tipo de público independientemente de la condición física y edad.

 

Con 6 rutas diferentes, guía local y audioguía en 4 lenguas, mezcla de naturaleza, museo e iglesias románicas, el Bus Turístic es una forma cómoda y diferente de conocer lo menos conocido del país de los Pirineos sin necesidad de hacer ninguna gran caminata.

 

A un precio muy asequible (15€ las rutas de medio día para mayores de 12 años, 50% precio entre 4 y 12 años, gratuito menores de 3) visitar puntos panorámicos a la vez que referentes de la cultura ancestral de estos valles de los Pirineos con una ruta marcada y bien explicada, con horario determinado (9h a 13h30) ya es posible.

 

 

Los lunes y los jueves son para la bonita iglesia de Sant Miquel y la casa- museo Casa Cristo de Encamp, para seguir hasta el Santuari de Meritxell, incluido en la ruta Mariana europea, para continuar hasta el Museu de la moto y la pequeña iglesia románica de Sant Joan de Caselles en Canillo. 

Para acabar, la estrella de los miradores: visita al Roc del Quer (imprescindible calzado cómodo)

 

Los martes la ruta propuesta es más urbanita: Visita a Sant Julià, con su Museu del tabac, iglesia pre románica de Santa Coloma y l’Estany d’Engolasters, donde se puede disfrutar de un paseo alrededor del lago antes de visitar la espectacular iglesia románica de Sant Miquel d’Engolasters, punto desde donde se puede disfrutar puestas de sol increíbles.

 

Paisajes y antiguos oficios son para los miércoles: Visita a la Farga Rossell, donde se puede vivir en primera persona como se trabajaba el hierro que se bajaba de las minas repartidas por las montañas, subida a más de 2.000 para visitar un punto panorámico por excelencia, el Coll de la Botella y después bajar desde La Caubella de Pal por el telecabina hasta el pueblo de La Massana, con vista al Casamanya.

 

Los viernes se cargan de energía con la visita al Museu de l’electricitat, l’Estany d’Engolasters, el circuito de Les Fonts y Sant Miquel d’Engolasters. Sol y sombra para los días más calurosos y a 1.600 m de altitud.

 

Si se prefiere día entero, la opción es la de los sábados (29€/pax con comida incluida): El trabajo del hierro como antaño en la Farga Rossell de La Massana, para continuar rumbo norte hasta la iglesia de Sant Martí de la Cortinada, la cual conserva unos frescos preciosos en su interior. 

 

La ruta continua hasta Arcalís, donde se puede contemplar uno de los paisajes más abruptos de Andorra.

 

De bajada, parada para comer en El Serrat.

 

Para finalizar la semana, los domingos, el Bus Turístic propone empezar el día por el centro de visitantes del Parc Natural de les Valls del Comapedrosa, para continuar la visita en el Roc de la Sabina, el bonito pueblo de Pal, subir hasta los 2.064 m del Coll de la Botella y bajar hasta La Caubella, a 1.900, para descender con telecabina hasta los 1.250 m del pueblo de La Massana.

 

Opciones diferentes y atractivas para visitar algunos de los rincones menos conocidos de este principado de tan sólo 468 km2.

 

 

Teléfono reservas: 00 376 805 151