Valles, cimas, ríos o puertos de montaña son los escenarios perfectos para descubrir la cara más salvaje de la nieve. En Andorra se puede disfrutar del mejor paisaje mientras se practican dos deportes de nieve que cada vez tienen más adeptos: las raquetas y el esquí de montaña. Aunque el nivel de intensidad puede variar mucho, suele ser necesario ir acompañado de un guía que conozca bien tanto la ruta como la técnica.

 

 

Según el presidente de la Asociación de Guías y Acompañantes de Montaña de Andorra, Joan Marc Xarpell, el esquí de montaña está ganando practicantes porque “Por un lado, quienes conocen mucho el esquí de pista buscan algo diferente y, por otro lado, todo el mundo que quiere hacer deporte cardiovascular encuentra en esta práctica un buen aliado”. En cuanto a las raquetas, Xarpell considera que “son la mejor alternativa para las personas que no esquían pero que se encuentran con la familia en la montaña”.

 

Xarpell propone dos rutas para conocer Andorra de un modo diferente:

 

 

El circo glaciar de Pessons es el más grande de Andorra y uno de los lugares más visitados del País de los Pirineos en verano. En invierno, el paisaje se transforma y se convierte en un paraje majestuoso donde solo se respira silencio.

 

 

La ruta empieza en el aparcamiento de Cubil, en la estación de esquí de Grau Roig, en Grandvalira, a una altura de 2.100 metros. Seguiremos el recorrido de esquí de montaña de la misma estación, donde un rótulo indica ‘Pessons’, cerca del restaurante de Els Tres Estanys. Este camino está marcado con palos naranjas y negros y nos conduce sin esfuerzo hasta el primer lago. Seguiremos por la izquierda del restaurante de Pessons hasta el lago Forcat. Se continúa por el camino de verano GR siguiendo las marcas blancas y rojas hasta el lago de Les Fonts, a 2.490m. De vuelta, se baja por un pequeño valle de pendientes suaves hasta el primer lago, donde se puede parar a comer.

 

El camino del Obac en el Vall d'Incles es el recorrido ideal para iniciarse en las raquetas mientras se comparte un día con la familia.

 

 

Se trata de un itinerario muy llano que se hace en unas dos horas y media. El camino sigue el curso del río durante casi 3 km. El camino, que sigue el fondo del valle, es amplio y claro y permite contemplar la vegetación típica de la alta montaña.

 

 

Otra opción muy emocionante es hacer el camino en una noche de luna llena porque la luz que se proyecta sobre la nieve hace que no sea necesario llevar frontal en la cabeza. De vuelta, se puede cenar en Borda del Rector; donde se puede dejar el coche en el aparcamiento antes de empezar la excursión.

 

 

Antes de salir de excursión hace falta consultar siempre la previsión meteorológica (www.meteo.ad) y también conocer qué riesgo de aludes hay. El cuerpo de Banders de Andorra cuelga cada día en su perfil de Twitter @BandersAndorra la información relacionada con los aludes. En caso de que haya un alud, no hay que perder de vista a nadie y hay que avisar a Emergencias, al número 112, si hay afectados. Es imprescindible llevar material como casco, ARVA, pala y sonda si se realizan salidas de gran nivel técnico.

 

• Asociación de Guías y Acompañantes de Montaña de Andorra (AGAMA)
• Blog de rutas de montaña del guía Joan Marc Xarpell
• Raquetas en la estación de Grandvalira
• Raquetas en la estación de Vallnord
• Borda del Rector
• Restaurant Refugi del Llac de Pessons