Las 7 reinas negras de La Molina
Esquiadores en la pista Alpina de La Molina (Foto: Ivan Sanz).
Sobre mapa La Molina es una estación con pistas para todos los niveles. Es, en ese sentido, una estación apta para los esquiadores de nivel medio y alto, pero lo cierto es que esta estación también tiene 7 pistas destinadas al esquiador experto con mucha historia, y es que con 75 años a sus espaldas por fuerza sus trazados negros deben ser igualmente historia pura en el mundo del esquí.
Esquiador saltando en la pista Barcelona, una histórica de La Molina (Foto: I. Sanz).
La Molina es una estación que tiene sus pistas trazadas básicamente en las pendientes o estribaciones que miran hacia el norte de dos cumbres: el Puigllançada (2.406 m), por un lado, y la Tosa d’Alp (2.537 m), por el otro. La Molina tiene sobre mapa 7 pistas negras, entre las que se destacan las 3 históricas Estadi, Els Coms y Barcelona, y 4 menos concurridas, que son la Nevera, la Alpina, Isards y Els Cingles.
1 • El Estadi
La pista 28 de La Molina es toda una histórica en el esquí catalán. De las 7 es la más comercial y concurrida. Situada en la zona central de la estación y encarada a norte es uno de los signos de identidad de la estación, y lo es por su centralidad, por su anchura y por su visibilidad desde buena parte de los entornos.
La Molina organizó en esa pista su primera Copa de Europa en febrero de 2003 y desde entonces el circuito continental ha pasado por allí cada año excepto en las temporadas 2012, 2014 y 2015. Se celebran slaloms, slalom gigantes y supergigantes. La pista está homologada por la FIS y recordamos que en el año 2008 se celebró en ella una prueba de la Copa del Mundo de esquí alpino femenino.
Dispone de red de cañones de alta presión a ambos lados. Tiene una longitud de 517 m, un desnivel de 171. Esquiar el Estadi es un requisito obligatorio si se visita La Molina. Posiblemente sea la primera pista negra del Pirineo catalán y la primera que se debía dibujar sobre un mapa de pistas.
Pista El Estadi de La Molina durante la celebración de una prueba de la Copa de Europa en 2018 (Foto: I. Sanz).
2 • Els Coms
Una pista de las que podemos calificar de históricas en la estación ceretana. Esta pista, aunque figuraba en los mapas de la estación desde los años 70 del siglo pasado, se había quedado como una pista olvidada para buena parte de los esquiadores. En realidad, era la pista comercial del telesquí Roc Blanc, hasta que éste se dejó de poner en marcha y en consecuencia la pista perdió popularidad.
No fue hasta la temporada 2009/10 cuando fue desbrozada y condicionada de nuevo con paravientos. Desde la temporada 11/12 las pisanieves la repasan y está previsto que en un futuro reciba apoyo de cañones.
Els Coms figura en el mapa como la pista núm. 11. Tiene 1.086 m de longitud, 347 m de desnivel. La parte alta empieza descubierta de bosque y es bastante ancha. Poco a poco la pendiente se hace más pronunciada y se va haciendo estrecha a medida que bajamos de cota, hasta quedar bien rodeada de bosque de pino negro.
Uno de los inconvenientes de esta pista es que queda sectorizada en dos partes a su mitad de trayecto por el paso del camino, o pista, conocido como la Genciana.
Vista parcial de la pista Els Coms (Foto: I. Sanz).
3 • Barcelona
Ubicada en la montaña de la Tosa, con una longitud de aproximadamente 900 m. Sin bosque en ningún lateral en la parte alta, de orientación este. No dispone de innivación. Se convertirá el estadio de Descenso de unos hipotéticos juegos de invierno a celebrar en La Molina-Masella.
Fue en 1957, cuando en el actual trazado de la pista Barcelona, se organizó una carrera con el nombre de Copa Barcelona y este hecho fue lo que dio origen a bautizarla así.
Esquiador saltando en la pista Barcelona, una histórica de La Molina (Foto: I. Sanz).
4 • Nevera
También en la parte central de la estación y en buena parte con un trazado paralelo al Estadio. Sobre mapas es la pista número 30. Como sugiere su nombre es una pista muy sombría por ubicación y por ser una pista estrecha que atraviesa un bosque tupido de pino negro. No siempre es fácil encontrar la entrada, no se pisa y no dispone de innivación de apoyo. Tiene una longitud de 382 m. y un desnivel de 160. Como curiosidad, su tramo final pasa junto a el histórico trampolín de saltos de 70 m. de La Molina.
¿Quién va primero? (Foto: I. Sanz).
5 • Els Cingles
La más estrecha y posiblemente la más difícil de las 7 reinas negras. Calificada con doble diamante. Encarada a norte. Está situada en la zona de la Tosa y se accede a ella desde el tramo alto de la pista Comabella.
Antiguamente era conocida por el nombre de la Font Gran. Es una pista negra de nivel extremo, que no dispone de sistema de producción de nieve y muy valorada por los esquiadores amantes de la nieve virgen, ya que es una pista que no se pisa. Parte alta descubierta de vegetación, mientras la parte baja es estrecha, de pendiente muy pronunciada y protegida de bosque de pino negro en ambos lados. Desnivel de 335 m y una longitud de casi 1 kilómetro.
Instructores de la escuela Snow&Go en la entrada de la pista Els Cingles (Foto: I. Sanz).
6 • Isards
Pista también situada en la zona de la Tosa, que discurre paralela entre la Comabella y la Barcelona. Encarada a este, con una longitud de 900 m y un desnivel de 265 m. y del todo descubierta de bosque. No dispone de sistema de producción de nieve. Y al igual que la pista Els Cingles no se pisa.
Baliza de entrada en la pista Isards de La Molina (Foto: I. Sanz).
8 • Alpina
Como las dos anteriores, la pista Alpina se encuentra situada en la zona de la Tosa, con salida cercana al telesquí de Set Fonts o bien desde el final de Dues Estacions. Enlaza con la Olímpica. Largo de 305 m y un desnivel de 128 m. Encarada a noreste, tampoco dispone de sistema de producción de nieve y no se pisa, motivo que como ocurre con Isards, Els Cingles y Nevera, da un plus de nivel para los clientes más expertos.
¿Os animáis?
En la pista Alpina de La molina (Foto: I. Sanz).
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