A principios de año ha entrado en servicio una línea ferroviaria de alta velocidad que une Beijing y Zhangjiakou, en la provincia de Hebei del norte de China, lo que reduce significativamente el tiempo de viaje entre las dos sedes de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 y proporciona un motor para impulsar el crecimiento de la región.

 

La compañía China State Railway Group Co. informa que la línea tiene un recorrido de 174 km. Va desde la estación de tren norte de Beijing, en el distrito Xicheng de la capital, pasa por los distritos de Changping y Yanqing, y termina en la estación de tren Zhangjiakou. Hay 10 estaciones a lo largo de la línea.

 

Desde la estación norte de Xiahuayuan parte otra línea -también estrenada este 2020- al distrito de Chongli, donde se realizarán la mayoría de los eventos de nieve de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022.

 

 

El nuevo ferrocarril reduce el tiempo de viaje entre Beijing y Zhangjiakou de las más de tres horas actuales a 47 minutos. Desde allí, el Ferrocarril Chongli conecta con la terminal de trenes Taizicheng, en la Villa Olímpica de Chonglui, que tiene 53 kilómetros, en 17 minutos.

 

La línea Beijing-Zhangjiakou tiene una velocidad diseñada de 350 kilómetros por hora - se probó a una velocidad de hasta 385 km/h - y la línea del ferrocarril de Chongli alcanza los 250 km/h, según China Railway. Más de 30 trenes de ida y vuelta circulan diariamente en las dos líneas.

 

En total, 64 minutos desde la capital de la China hasta sus estaciones de esquí, lo que ha animado a muchos ciudadanos de Beijing a decantarse por el tren como medio de transporte para ir a esquiar.

 

 

Un ejemplo Xiao Zhen, una empleada de una compañía de internet de Beijing, que lleva cuatro años esquiando en las pistas de esquí del distrito de Chongli. Hasta ahora, tardaba de cuatro a cinco horas en llegar a su destino y otras tantas en regresar a su casa. Con la línea ferroviaria de alta velocidad Beijing-Zhangjiakou, ha reducido el tiempo de viaje a una hora y ha ganado en comodidad.

 

Por si fuera poco, el viaje sale mucho más baratio. Antes ida y vuelta entre Beijing y Chongli costaba unos 500 yuanes (65,14 euros). Ahora, un asiento de segunda clase para el viaje de 64 minutos en el tren de alta velocidad Beijing-Chongli cuesta 99 yuanes (12,90 euros).