Treinta centímetros de nieve nueva y los cañones funcionando a destajo. Esta es la imagen de Sierra Nevada después de las nevadas del fin de semana y de esta mañana. La estación granadina presenta ya su estampa totalmente invernal y ha puesto las máquinas pisapistas a trabajar para asentar la nieve caída.

La nevada ha ido acompañada de un desplome de las temperaturas (situándose alrededor de los 3 grados negativos), lo que también ha permitido a Cetursa -responsable de la explotación de las instalaciones de Sierra Nevada- poner en marcha hasta cien cañones para la producción de nieve artificial.

Al mediodía de hoy han tenido una tregua y ha salido el sol:

Los esfuerzos de las máquinas y los sistemas de innivación se concentran en la zona de principiantes de Borreguiles -donde hay una base de 30 centímetros- y en Pradollano -allí se acumulan 15 centímetros-.

La fecha fijada para la inauguración oficial de la temporada de esquí 2018-19 de Sierra Nevada es el próximo día 1 de diciembre, aunque cuando Cetursa ha sido interpelada en las redes sociales sobre la apertura de pistas e instalaciones, la respuesta ha sido que "todo dependerá de la nieve".

Así las cosas, lo más probable -si se mantienen las condiciones de frío y cae alguna que otra nevada.- es que el inicio de la campaña invernal se adelante al fin de semana del 23 y 24 de noviembre.