Un destino ideal para ir a esquiar y practicar muchas otras actividades invernales muy cerca de casa: está solo a dos horas y media de la ciudad de Barcelona y a 6 horas de Madrid, ideal para escaparte un fin de semana.

 

Sales un viernes y vuelves un domingo, no es mucho tiempo, pero lo suficiente como para vivir un fin de semana inolvidable. Para exprimirlo al máximo, te recomendamos algo de planificación. ¿Qué estaciones de esquí hay y qué te encontrarás en cada una de ellas? ¿Qué otras actividades puedes hacer, además de esquiar? ¿Cuáles son las mejores propuestas para el ‘après-ski’? ¿Dónde está la mejor fiesta nocturna? Toma nota, te ayudamos a aprovechar tu viaje de esquí a Andorra.

 

 

En primer lugar, tendrás que decidir a qué estación de esquí iréis. ¿Preferís algo de ambiente y km de pistas para elegir? Vuestro destino es Grandvalira. ¿O buscáis una estación más diferente, tranquila y familiar? Entonces podréis elegir entre Ordino Arcalís y Pal Arinsal.

 

 

Esquiar en Grandvalira. Es la reina de Andorra con sus 210 kilómetros esquiables, en los que encontraremos 128 pistas de todos los niveles de dificultad (19 verdes, 49 azules, 42 rojas y 18 negras). No faltan áreas para practicar freeride, tres snowparks, un boardercross permanente, circuitos de esquí de montaña, una pista cronometrada, seis áreas infantiles tematizadas y mucho más. No os perdáis la pista nocturna de Pas de la Casa, el sector conocido por las mejores condiciones de la nieve de Grandvalira por su altitud, y que abre los jueves y sábados de 17 a 20 horas.

 

 

Esquiar en Ordino Arcalís. Es una estación de esquí de tamaño medio, con 30,5 kilómetros esquiables y 29 pistas (9 verdes, 7 azules, 11 rojas y 2 negras), así como circuitos para skimo, itinerarios freeride, área de freestyle, snowpark de 15.000 metros cuadrados, slalom área, zona para debutantes con telecuerda gratuito y circuito infantil. Es un destino muy versátil, con pistas para todos los públicos. Y si buscáis hacer algo diferente, podéis probar el Heliski Experience: vuelos en helicóptero para practicar un freeride muy salvaje.

 

 

Esquiar en Pal Arinsal. Algo más grande, esta estación suma, entre ambos sectores, 63 kilómetros esquiables con 44 pistas (7 verdes, 17 azules, 17 rojas y 4 negras). El sector de Pal es el más apropiado para familias y debutantes, gracias al perfil de montaña suave y de pistas amplias; en cambio, los que buscan algo más de adrenalina no deben perderse el sector de Arinsal, con más de 1.000 metros de bajada y descensos rápidos, entre los que recomendamos pistas míticas como “La Capa” o ‘Les Marrades’, que llega hasta el mismo pueblo de Arinsal.

 

 

 

Cuando cierran las pistas de esquí, hacia las 17 horas, todavía queda mucho día por delante y Andorra tiene mucho por ofrecernos. Hay propuestas para todos los públicos: buena gastronomía, irte de compras, balnearios de prestigio, fiesta hasta que aguante el cuerpo…

 

 

 

¡Porque no todo iba a ser meterle caña al cuerpo! Este pequeño país de los Pirineos es conocido por sus aguas termales llenas de propiedades, que han aprovechado diferentes balnearios para brindar un descanso para cuerpo y mente. El más conocido es Caldea, el más grande del sur de Europa, con espacios diferenciados: Termolúdico, para amigos y familias; Inúu, donde solo pueden entrar personas a partir de los 16 años; Likids, un área donde solo pueden entrar los niños y niñas, que quedarán en manos de profesionales; y Orígenes, un lugar muy especial con baños exóticos. También hay otros balnearios en Andorra como el Anyós Park, ubicado en el hotel del mismo nombre en Escaldes-Engordany, con un impresionante Wellness Resort con sauna, jacuzzi, hammam, cascadas y mucho más.

 

 

 

Irse de “shopping” es una actividad casi obligatoria en tu viaje al país pirenaico. Andorra suma 10 kilómetros de calles con tiendas y los enclaves más populares para comprar son la Avenida Meritxell y los centros comerciales y outlets de Andorra la Vella, así como el centro comercial L’Illa Carlemany de Escaldes-Engordany. Andorra es un sitio ideal para comprar marcas de gran calidad y productos gourmet a precios sensiblemente más baratos gracias a su menor carga de impuestos. Por tanto, los artículos que más suelen salir a cuenta son aquellos de alta gama relacionados con la electrónica, joyas y relojes, tabaco y bebidas alcohólicas y perfumes y cosmética.

 

 

 

La gasolina del cuerpo es la comida y en un viaje a la nieve se quema mucho, por lo que hay que repostar como nos merecemos. En Andorra encontraremos restaurantes de muy buena calidad, como la Borda Estevet, en la carretera de La Camella en la capital: platos de calidad de cocina mediterránea y carnes en un entorno muy acogedor. Otra opción es la Taverna Lapurdi, moderno y con comida de calidad, con menús del día; oel Restaurant Versailles, en el Cap del Carrer, para los paladares más selectos, entre muchos otros.

 

 

 

La capital, Andorra la Vella, es el lugar ideal para seguir la marcha hasta que el cuerpo aguante con salas como Kapital Andorra, Klub Andorra o La Sal. Los esquiadores no deben perderse el ‘après-ski’ del nuevo Abarset o L’Après Amélie, una gran terraza en el Funicamp de Grandvalira o el Snowclub de El Tarter, igualmente en Grandvalira. Los que os quedáis por la zona de Arinsal, podéis tomar algo en el Derby Irish Pub, y a los que habéis elegido Ordino, os espera el pub Xaloc.