En total, Sierra Nevada dispondrá este invierno de más de 300 cañones de producción de nieve, casi todos automáticos que deben ayudar a abrir la estación el fin de semana del 28 y 29 de noviembre, según el calendario previsto.

 

 

Los nuevos TR10 (15 fijos y 4 móviles) y TL6 (81 unidades) destacan por su alto rendimiento en condiciones marginales y alta eficiencia en el consumo de luz y agua. 

 

Así lo pudieron comprobar la temporada pasada los técnicos de Sierra Nevada y de Techno Alpin (la multinacional italiana líder en el sector de nieve producida) con los 33 cañones de los mismos modelos adquiridos hace un año.

 

 

El departamento de Nieve Producida arrancará las pruebas de todo el sistema a mediados de octubre.

 

Tal y como estaba previsto, las nuevas adquisiciones han sido distribuidas fundamentalmente en la columna vertebral de la estación, desde la superior del Telesilla Stadium (3.000 metros) hasta Pradollano (2.100 metros), pasando por la zona Principiantes de Borreguiles.

 

 

Los 44 cañones reubicados, que aún presentan un rendimiento aceptable (20 de baja presión modelos M10/12/15/18/20 y 24 de alta presión tipo A9/30), han sido trasladados, entre otras pistas, a la Zahareña.

 

Está previsto, una vez empiece la temporada, mover varios de ellos a la cabecera de la pista 'negra' Fuente del tesoro.

 

 

Los TL6 son cañones de alta presión. Fijos con posibilidad limitada de ser girados (solo manualmente). Tienen menor capacidad de producción que los TR10 pero con mayores posibilidades de funcionamiento en condiciones meteorológicas adversas (niebla, nevadas).

 

El TL6 necesita alimentación con aire comprimido desde una central vía tubería. Mayor necesidad de mover la nieve producida (acumulada debajo del cañón) con máquinas pisa nieves.

 

 

Los TR10 son cañones de baja presión (con turbina y compresor de aire localmente integrado). La mayoría deben estar fijos en una determinada ubicación y con posibilidad de giro motorizado de hasta 360 grados.

 

Tienen mayor capacidad y reparto de producción que los TL6, por lo que son especialmente indicados para innivar grandes áreas y pistas con fuerte pendiente.

 

El TR10 no necesita alimentación con aire comprimido central y menor necesidad de mover la nieve producida con máquinas.