Hoy, el esquiador andorrano Joan Verdú ha reafirmado que su nivel es lo suficientemente alto como para aspirar a resultados destacados no solo a nivel mundial, sino también para mantenerlos.

 

Si la semana pasada ocupaba el tercer lugar en Val d'Isère, firmando su primer podio personal y para el esquí alpino andorrano, hoy en la Copa del Mundo de Alta Badia (Italia) volvió a esquiar de manera magistral en ambas mangas para terminar en quinta posición.

 

 

Verdú ha salido con determinación desde el principio hasta el final, como demuestra el resultado. Con un tiempo de 2:31.90, se ubicó en quinta posición, a 2.67 segundos del ganador, el suizo Marco Odermatt, y a solo 0.41 segundos del podio.

 

En la primera manga, Verdú aprovechó el dorsal 13 que llevaba. Desarrolló un esquí sólido que le permitió llegar en sexto lugar, incluso recuperándose de un enganche con uno de sus bastones en una de las últimas puertas del exigente recorrido de Alta Badia. A pesar de la corrección, su tiempo de manga, 1:16.53, lo situó a +1.70 segundos del mejor tiempo de la primera bajada, que fue para el suizo Marco Odermatt con 1:14.83. Verdú marcó el cuarto tiempo en el primer sector, el sexto en el segundo, el octavo en el tercero, y el parcial en el último sector fue el 35º, justo donde tuvo el percance con el bastón y la puerta.

 

En la segunda manga, el esquiador andorrano no se escondió en ningún momento. Luchó de principio a fin de la carrera, marcando tiempos que inicialmente lo dejaron como líder hasta que bajaron los competidores que tenía detrás. Finalmente, su tiempo de 1:15.37 fue el quinto de la manga, a 1.09 segundos del mejor registro de esta segunda bajada, que fue para el croata Filip Zubcic con 1:14.28.