Muchos deportistas de élite de varias disciplinas han acudido a esta piscina la Y-40, que contiene un pozo de 42 metros de profundidad. Se encuentra en Padua, y forma parte del Hotel Terme Millepini, existiendo multitud de ventanas y hasta un túnel para poder observar a los buceadores.  

 

Lucas Eguibar y el flamante medalla de bronce Regino Hernández, deportistas españoles en los Juegos de Invierno, en la modalidad de snowboard-cross, se metieron en la piscina para mejorar su capacidad respiratoria y controlar mejor situaciones de estrés.

 

Se trata de un método de entrenamiento, la apnea a grandes profundidades, el cuerpo humano ante las inmersiones y la falta de oxígeno, disminuye los latidos del corazón y baja el consumo de oxígeno. El corazón envía menos sangre a la periferia del cuerpo y dirige toda la sangre al corazón y el cerebro. Además aporta una ayuda mental muy importante para el control del estrés, uno de los demonios que puede surgir a cualquier deportista en una competición tan importante como unos juegos olímpicos.

 

 

Si queréis experimentar lo que se siente en una piscina de 42 metros de profundidad podéis contactar con el Hotel Terme Millepini en www.millepini.it o ver el video que os mostramos a continuación: