Medalla de Oro en la prueba de descenso de los Juegos Olímpicos de Sochi para el austríaco Matthias Mayer, quien se ha impuesto con un tiempo de 2:06.23 a los grandes especialistas de esta modalidad, por delante del italiano Christof Innerhofer, segundo (2:06.29) y del noruego Kjetil Jansrud, tercero (2:06.33).

 

El austriaco gobernó con maestría la muy técnica parte alta del trazado y solventó de forma impecable los dos largos saltos -el 'Russian Trampoline' y el 'Lake Jump'- de la pista caucásica, de 3.495 metros de longitud y un desnivel de 1.075.

 

 

 

El bronce fue para el noruego Kjetil Jansrud, otro valor seguro del potente equipo nórdico, que, sin destacar en exceso capturó su segunda medalla en unos Juegos, después de la plata que se colgó al pecho en el gigante de Vancouver.

 

 

 

Tres medallistas merecidos que no por ello dejaron de erigirse en sorprendentes protagonistas de una jornada llamada a ser, sobre el papel, un duelo entre el genial Bode Miller -que con 36 años aspiraba al oro, después de haber brillado en los entrenamientos- y el no menos espectacular Aksel Lund Svindal.

 

Sin embargo, el favorito Bode Miller, cuádruple campeón mundial, doble ganador de la Copa del Mundo y quíntuple medallista olímpico, bajó con el dorsal 15 y marcó en ese momento el sexto mejor parcial -que no desbancaba a ninguno de los tres primeros, ya en meta- y acabó en un insípido octavo puesto. 

 

Del mismo modo, el noruego Askel Lund Svindal, vigente campeón del mundo, también se quedó fuera del podio y terminó cuarto a 32 centésimas de Mayer.

 

Los españoles Paul de la Cuesta y Ferrán Terra acabaron a 3.23 y 5.20 del líder, respectivamente.

 

 

 

 

Fuente: RTVE