En plena semana de DANA y posterior irrupción de aire polar con nevadas en buena parte de la Península, cada país es un mundo y conviene recordar que, en el caso de Andorra, es obligatorio llevar equipamientos especiales (ruedas de invierno, cadenas o fundas) desde el 1 de noviembre y hasta el 15 de mayo.

Pero año tras año no deja de sorprender la facilidad con la que se colapsa la red viaria del Principado cuando nieva, sobre todo, en las Parroquias centrales.

Según informa la Radio y Televisión andorrana, los centros de esquí andorranos verían compensadas sus cuantiosas pérdidas acumuladas durante el invierno 2020-21 con una ampliación de 10 años de las concesiones de los terrenos.

¿La forma? Mediante la inclusión en el proyecto de ley de los presupuestos del Estado del 2022 en su disposición adicional segunda, la ampliación de hasta un 20% de la duración de los contratos de concesión para restablecer el equilibrio económico de sus contratos públicos.

Con el anuncio de la obligación de comprar un forfait para poder practicar el esquí de montaña en los dominios andorranos y no ser multados, el pase Skimo ha adquirido mayor importancia.

Estamos en los meses donde se realiza la importante contratación de trabajadores temporales para el invierno. Andorra, el principal destino de los Pirineos por número de esquiadores.

Después del año “perdido” por la pandemia, las estaciones andorranas prevén volver a la normalidad con cifras parecidas a 2019 y necesitan una importante cantidad de personal. Aunque se calcula que la mitad de los trabajadores serán andorranos, la otra mitad legará como cada año de fuera, en muchos casos de países extracomunitarios.