Boí-Taüll Resort, la estación de esquí más alta de los Pirineos, ha cerrado las fiestas de Navidad y Reyes con una ocupación superior al 90%. Estas cifras, en parte, son gracias a la consolidación del destino con una clientela fiel estable y una nueva que se incorpora, que ha disfrutado de unas excelentes condiciones de nieve, con grosores que variaban de los 100 cm en la base de la estación a los 110 cm en las cotas medias y altas.