Según unas declaraciones de Kilian Jornet, probablemente la mayor autoridad mundial en estos momentos de las carreras de montaña ya sean en esquís o en zapatillas, tras los hechos surrealistas que acaecieron después de la prueba individual del Campeonato del Mundo ISMF de Skimo celebrada en la Cambre d´Aze (Pirineos Orientales), se desprende el desencuentro que en estos momentos existe entre los atletas y la International Ski Mountaineering Federation (ISMF).

 

Dejando de lado a los organizadores de la Carrera de la Cambre d´Aze —a los que Kilian felicita sobradamente por su trabajo— en el conflicto que surgió tras las penalización de Damiano Lenzi (el primero en entrar en la meta y al que siguió dos segundos después el extraterrestre catalán) y que colocaba a éste en lo alto del podium y al italiano en segundo lugar. 

 

Kilian ha querido poner blanco sobre negro desde su cuenta en Facebook las circunstancias por las que no se presentó a recoger el premio, no lo hicieron tampoco Lenzi ni el tercer clasificado el también transalpino Matteo Eydallin, por lo que fueron descalificados y los galardones hicieron un correturnos del cuarto en adelante. 

 

Kilian Jornet, Damiano Lenzi y Matteo Eydallin, el podium que no fue en Cambre d´Aze. Foto: FB de K. Jornet
 

En opinión de Jornet, a quién Damiano explicó que no había incurrido en falta por ajustar las fijaciones de sus botas fuera del área permitida, sino que lo hizo correctamente —como después se comprobaría en un vídeo— hecho que el árbitro designado por la ISMF no observó, aunque sí vio a Lenzi comprobar fuera de ese área si estaban bien ajustadas, creyendo que las estaba manipulando, y que dio lugar al error que desencadenó la polémica, las circunstancias no habrían de haber merecido la sanción de 1 minuto que colocaría a Damiano en segundo lugar ya que Kilian creyó en su versión, en una muestra más de su fair play, las explicaciones del italiano. 

 

Hay gotas que llenan los vasos y otras que los colman, y así ha sucedido en esta ocasión. Las palabras del multicampeón de Skimo y carreras de montaña, apoyadas por muchos de sus compañeros, desprenden un desencuentro entre los atletas y el máximo organismo internacional que regula la competición en estos deportes y que, por otro lado, de velar por quienes los practican. 

 

El esquí de montaña ha entrado desde el pasado año a formar parte de la competición en Juegos Olímpicos de Invierno, lo que ha llevado a la Federación Internacional que los regula (ISMF) a realizar cambios en pos de dar una imagen de deporte profesional, con reglas muy estrictas, presionada posiblemente por los medios de comunicación, patrocinadores, etc. priorizando el espectáculo mediático en un deporte en el que los valores del respeto y camaradería, es decir, la esencia de la montaña, están firmemente arraigados tal y como han demostrado los que los practican y cuya última manifestación pública ha quedado evidente al negarse los tres primeros clasificados a recoger los premios en el Skimo de Cambre d´Aze, en solidaridad con quien legalmente ganó y que fue injustamente sancionado. Los merecedores del podium (Kilian, Damiano y Matteo) fueron descalificados por ello al no presentarse. Otra norma impuesta que roza, cuanto menos, el absurdo. 

 

Un momento de la carrera en Cambre d´Aze. Foto: estación de esquí de Cambre d´Aze
 

Señala nuestro corredor universal también que desde la International Ski Mountaineering Federation se les pidió a los participantes no dar mucha propaganda al asunto (la metedura de pata en la Cambre d´Aze de la ISMF ha sido de campeonato, nunca mejor dicho) pero una vez más los valores en los que cree, y quienes lo seguimos le reconocemos, no le han cerrado la boca y ha puesto puntos sobre la íes ante tal injusticia pues el asunto no es nuevo y viene de largo. 

 

«Desde hace 5-6 años este tipo de problemas se da en las carreras (de montaña), con los mismos árbitros de siempre, cuando las organizaciones dependen en gran parte de voluntarios y las condiciones en las montañas son desafiantes, no se pueden controlar suficientemente. Algunas veces, puede ser culpa de los atletas, pero en otras, pueden ser el marcado, errores de organización o de algunos árbitros ( con poca flexibilidad para reconocer si los errores se deben a los participantes o hay factores externos que los determinan». «Uno de ellos, por cierto, trabaja y cobra de la federación francesa de esquí de montaña (FFSM) y al mismo tiempo es árbitro internacional» comenta Kilian. 

 

Foto de archivo de kilian Jornet. Agradecimiento imagen: Kilian Jornet FB
 

En un deporte donde la pasión por practicarlo mueve montañas; donde el juego limpio va más allá de las cimas que hay que superar y en el que las dificultades que la naturaleza opone —no pocas veces rozando lo extremo— no tienen reglas fijas, no puede estar encorsetado por una regulación estricta sino que requiere de cierta flexibilidad. Hablamos de cosas tan simples como el avituallamiento o las zonas de refresco en las cambiantes condiciones sobre el terreno por poner un ejemplo. 

 

«Hemos estado enviando nuestras preocupaciones al ISMF de la manera habitual (el comité de atletas y las federaciones nacionales) desde hace algunos años y tenemos buenas palabras, pero no hay regulaciones o cambios en los árbitros, así que pensamos que quizás la única manera de tratar de cambiar es pensar en hacer públicas nuestras preocupaciones.» concluye el gran deportista catalán.

 

Y acaba con una sentencia: «Muchas gracias por leer eso, y de todos modos, hoy fue una buena, una gran pelea, una gran competición y mañana tendremos más montañas para esquiar. Y si las copas del mundo continúan con esta forma de autodestrucción, siempre habrá grandes carreras como la Pierra Menta, Mezzalama, Rutor ... :).
 

Blanco y en botella.