Sáb, 11/10/2014 - 11:26
El pasado miércoles 8 de octubre, el montañero Agustín N. G. de 34 años, vecino de Castro Urdiales, perdió la vida mientras practicaba su deporte favorito en el monte Cerredo de Liendo (Cantabria) al parecer al despeñarse al mar desde un acantilado
Agustín N. G. de 34 años, vecino de Castro Urdiales, gran aficionado al montañismo, ha perdido la vida mientras practicaba su deporte favorito en el monte Cerredo de Liendo (Cantabria), entre las playas de Sonabia y San Julián. Todo ocurrió el miércoles día 8 de octubre cuando, al parecer, el montañero resbaló en un barranco y fue a caer al agua perdiendo la vida en el accidente. Siete horas más tarde de darlo por desaparecido, el helicóptero del 112 encontraba el cuerpo ya sin vida de Agustín en las aguas de la playa de Oriñón.
Al parecer, Agustín conocía muy bien esta zona de acantilados llamada "el Rancho" y que suele ser muy frecuentada por otros montañeros y excursionistas. Se decidió aquel día por practicar treckking solo, por lo que se fue hasta las inmediaciones del monte Cerredo por la senda que llega hasta el municipio de Liendo para hacer el recorrido que tan bien conocía y en el que ocurrió el accidente que acabó con el fatal desenlace.
Miembros del DYA y helicóptero del 112
Al día siguiente, al darse cuenta de que no había regresado, sus padres avisaron al hermano de Agustín que junto con un amigo se dirigieron hasta la zona de Sonabia para ver si lo encontraban. Sin embargo, lo único que vieron por los acantilados fueron algunas prendas de ropa esparcidas que intuyeron que podían ser del joven desaparecido. A partir de ahí, avisaron a Emergencias 112 que puso en marcha el dispositivo de búsqueda y rescate.
La embarcación del DYA (Detente y Ayuda)"Sierra Lima" con base en Castro Urdiales se puso en marcha junto con un equipo de bomberos mientras se avisaba a Salvamento Marítimo, que envió a la zona un barco y un helicóptero. Más tarde, mientras los bomberos recuperaban restos que podrían pertenecer a Agustín, una visera y un bastón, se sumaba la Guardia Civil, una embarcación de Cruz Roja de Laredo y una ambulancia de la DYA.
Los signos en ese momento de que había ocurrido un accidente eran evidentes, desplazamientos de tierra consecuencia de una posible caida, restos de ropa y material, hicieron sospechar que algo grave podía haber ocurrido. La búsqueda continuaba con medios aéreos, terrestres y marítimos. A media tarde, al tiempo que los servicios de emergencia que operaban en la mar daban por concluida la búsqueda debido a las malas condiciones de ésta, el helicóptero del 112 localizaba el cadáver de Agustín en aguas de la playa de Oriñón Cantabria.
Nuestro pésame a familiares y amigos
D.E.P.
Fuente. el Diario Montañés
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