Nuevo éxito para el equipo de Relevos Mixtos de la FEDME formado por la granadina Ana Alonso Rodríguez (Club La Alpujarra) y el catalán Oriol Cardona Coll.

 

Siguen acaparando medallas y podios en todas las pruebas internacionales en las que compiten.

 

(Foto: Liquen Studio)
 

 

Los relevos mixtos, con un formato emocionante y visual, han sido el colofón perfecto para cerrar una competición que ha seguido posicionando la estación de Boí Taüll como escenario ideal para competiciones de calibre internacional y la práctica del esquí de montaña.

 

 

Quince equipos han participado en una prueba, que pone en valor el trabajo en equipo, uniendo parejas mixtas para un formato que será olímpico en 2026.

 

 

Las posiciones del liderazgo se han ido intercambiando durante todo el recorrido con la pareja italiana formada por Alba de Silvestro y Michele Boscacci, marcando la diferencia en los últimos relevos y consiguiendo un margen suficiente para llevarse la victoria, después de una undécima posición en la misma prueba el año anterior en los Mundiales en Boí.

 

 

 

 

Con esta segunda posición, la pareja formada por el catalán y la granadina consolidan su candidatura a los JJ. OO. de invierno; "hemos salido a darlo todo, en un relevo pueden pasar muchas cosas y finalmente hemos podido apretar en la segunda vuelta después de guardar algo de energía en la primera", decía Cardona.

 

Por su parte, la granadina comentaba que “estoy muy contenta de la medalla de plata e ir con Oriol siempre es un seguro de rendimiento, confiaba plenamente en la remontada”

 

En cuanto al resto de la selección española, la pareja formada por Marta Garcia e Iñigo Martínez, a pesar de una muy buena actuación en la ronda clasificatoria, no han podido conseguir una plaza en la final A, ya que sólo tiene acceso una pareja de cada selección.

 

 

 

Las cifras de participación finales de la ISMF World Cup Skimo Boí Taüll son apabullantes: unos 100 deportistas de 15 equipos. Además, ha habido involucradas más de 80 personas en lo que se refiere a la organización, de manera que durante una semana la Vall de Boí ha sido el refugio deportivo de unas 200 personas acreditadas implicadas en esta competición.