Thu, 30/11/2023 - 15:14
El sistema recién desarrollado será sometido a pruebas en las estaciones de montaña de FGC Turisme como parte de un proyecto que se extenderá por tres años. Este proyecto se integra en la estrategia de sostenibilidad de la empresa y está incluido en su Plan de Acción Climática.
El Laboratorio de la Nieve surge de la colaboración entre el Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (ICMAB-CSIC), Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) y la destacada empresa TechnoAlpin en el ámbito de la innovación tecnológica.
Además, cuenta con el respaldo financiero de los fondos Next Generation EU, concedidos por la Agencia Estatal de Investigación.
El presidente de FGC, Antoni Segarra en la presentación del proyecto del "Laboratori de la Neu". (Foto: Lugares de Nieve)
Este proyecto pionero en el mundo tiene como objetivo principal estudiar la aplicación de una nueva tecnología para producir nieve de manera más sostenible, en menos tiempo, utilizando menos agua y energía.
Desarrollada con éxito en laboratorios por el Dr. Albert Verdaguer, científico titular del CSIC en el ICMAB, y el equipo de TechnoAlpin mediante la aplicación de las últimas técnicas de producción con equipos tecnológicamente innovadores, las pruebas se trasladarán ahora a estaciones de FGC Turisme en condiciones y entornos reales.
La mejora que incorpora el Laboratorio de la Nieve consiste en simular el proceso natural de mineralización del agua y reproducirlo a pequeña escala, a diferencia de la tecnología aplicada hasta ahora, que utiliza exclusivamente agua como materia prima para crear nieve. Así, mediante la mineralización, se logra un núcleo que facilita la formación del copo de nieve más rápidamente, con mayor consistencia y a una temperatura más baja.
Presentación del proyecto del "Laboratori de la Neu". (Foto: Lugares de Nieve)
El Laboratorio utiliza minerales del grupo de los feldespatos, que son inofensivos para el medio ambiente y son un recurso natural abundante en la Tierra. También son una de las principales partículas en la atmósfera, que interactúan con las nubes e inducen la precipitación, sin alterar químicamente la composición del agua.
El proyecto estudiará el uso de la nueva tecnología en todas las situaciones posibles para determinar su viabilidad y beneficios en términos de ahorro energético, agua y capacidad de innivación. Está diseñado para obtener resultados universales máximos, con pruebas en diferentes ubicaciones.
El objetivo es obtener una tecnología que se pueda utilizar en cualquier estación de esquí, tanto en España como en el extranjero.
Prueba en las estaciones de montaña de FGC
El sistema de gestión de nieve implementado por FGC Turisme genera un ciclo cerrado a partir de los lagos donde se almacena el agua proveniente de la lluvia o deshielo de la misma área. Por lo tanto, las estaciones son un ejemplo de economía circular del agua.
Ciclo cerrado del agua
A partir del agua almacenada en las balsas de las estaciones, se produce nieve que se extiende en las pistas durante el invierno y, con la llegada de la primavera, esta misma nieve se derrite e ingresa al torrente que alimenta la balsa de la estación más cercana, volviendo así a su origen. Y vuelve a comenzar el ciclo: una vez llega el frío, esta agua volverá a la pista en forma de nieve. De esta manera, se puede afirmar que la nieve producida es una forma de nieve natural cultivada integrada en el ciclo del agua. En definitiva, no se consume agua, sino que se utiliza para cambiar su estado (de líquido a sólido). El consumo es únicamente de energía, que en el caso de FGC es energía verde garantizada en su totalidad.
El estudio se ha probado y desarrollado en laboratorios para garantizar su eficacia y eficiencia en la producción de nieve en las estaciones de esquí. Después del éxito logrado, el proyecto entra ahora en una fase crucial de prueba a gran escala en las estaciones de esquí de FGC Turisme. Se vislumbra un futuro prometedor para las estaciones de esquí, mostrando el compromiso compartido con la innovación y la sostenibilidad en un contexto cambiante.
Rueda de prensa de presentación del proyecto del "Laboratori de la Neu". (Foto: Lugares de Nieve)
FGC, con su vasta experiencia en innivación e instalaciones de pistas de esquí, liderará los esfuerzos para determinar la viabilidad y los beneficios de esta nueva tecnología en entornos reales y en términos de ahorro energético, agua y capacidad de innivación. Las pruebas se realizarán en áreas cerradas al público, garantizando la seguridad de las instalaciones habituales.
Se prevé comenzar en las estaciones de La Molina y Boí Taüll durante la temporada de invierno 2023/2024, e implementarlo en el resto de las estaciones de montaña durante los próximos tres años.
El Laboratorio de la Nieve forma parte del Plan de Acción Climática 2030 de FGC
El Plan de Acción Climática de FGC Turisme incluye el objetivo de reducir el consumo de agua y energía en la producción de nieve. Este compromiso se concretó con la definición de una política única y transversal en 2021. Este plan define la estrategia y las acciones a realizar en el horizonte 2030 con el objetivo de reducir un 50% el consumo de energía e impulsar la investigación para producir más nieve con menos gasto energético y de agua.
Las estaciones de montaña de FGC Turisme son un ejemplo de economía circular del agua con un sistema de gestión del agua, con la disposición de concesiones y almacenamiento en balsas para utilizarla en la producción de nieve.
La producción de nieve sigue un protocolo y una producción bastante sencilla. No hay ningún elemento que altere la composición del agua. Solo se produce un cambio de estado de líquido a sólido (agua transformada en hielo) o de sólido a líquido (hielo transformado en líquido) sin que se alteren las propiedades del agua. En este sentido, se realizan análisis físico-químicos de esta agua antes y después de pasar por los cañones que demuestran que mantiene su composición inalterada.
Balsa de La Molina para alimentar la red de nieve producida. Imagen tomada en septiembre de este 2023. (Foto: Carles Rusiñol)
En el caso de las estaciones de FGC, la producción de nieve no tiene ningún impacto en ríos y lagos. El agua que sale de los cañones de nieve no se obtiene directamente de ningún arroyo; siempre es agua previamente almacenada durante la temporada de lluvias, especialmente durante la primavera o el otoño.
Además, se realizan análisis de bioindicadores aguas arriba y aguas abajo de la actividad para verificar la calidad del agua, con un resultado de calidad del agua considerado bueno o muy bueno.
Adaptación al cambio climático
Ante la incertidumbre de los patrones de nieve debido al cambio climático, esta nueva tecnología se presenta como una respuesta innovadora y sostenible para mantener la continuidad de las estaciones de esquí en un entorno cambiante. Las estaciones de esquí de montaña son una realidad común en los Pirineos, brindan apoyo demográfico, facilitan el arraigo y generan oportunidades de empleo directas e indirectas, actuando como motores económicos que aportan valor al territorio.
Innivación durante esta semana de la base de la estación de La Molina.
De hecho, el impacto de las estaciones de montaña de FGC en la economía catalana se traduce en una inversión total (gestión, inversión y visitantes) de 148 millones de euros (en el año 2022), generando 2.721 puestos de trabajo y un impacto fiscal de 49 millones de euros.
El principal desafío es, por lo tanto, reducir los costos energéticos y ampliar las condiciones meteorológicas para que se pueda producir nieve de manera óptima, en términos de adaptación al cambio climático.
Además, esta nueva tecnología permite un menor consumo de agua para la misma cantidad de nieve, ya que su proceso de formación sigue una lógica más similar a la natural, al tiempo que aumenta la resiliencia de las zonas de montaña frente a los efectos económicos del cambio climático.