La estación de esquí La Pinilla, ubicada en la Sierra de Ayllón, ha decidido diversificar su oferta de ocio más allá de la temporada invernal.

 

 

Tras el éxito del primer aperitivo celebrado el pasado 27 y 28 de septiembre, que reunió a cerca de 8.000 personas, los organizadores de Zamna y los gestores de La Pinilla han anunciado este acuerdo que incluirá cinco citas de dos días de duración.

 

 

 

El festival Zamna, nacido en la paradisíaca localidad de Tulum, México, ha recorrido el mundo con eventos en ciudades icónicas como Barcelona, Miami, Ibiza o Nueva York.

 

La edición de septiembre en La Pinilla, promocionada inicialmente como "Zamna Madrid", sorprendió al anunciarse en esta estación de esquí, generando una gran expectación y no exenta de polémica.

 

La asociación ecologista 'Salvemos el Pico del Lobo' pidió la cancelación del evento debido a preocupaciones ambientales y de seguridad, dado que coincidía con la temporada de máxima restricción por incendios forestales en Castilla y León.

 

 

 

El gerente de La Pinilla, Raúl Gómez, destacó que Zamna es una experiencia que va más allá de la música. "Es un festival único, con un enfoque en la atención al detalle. Queremos que las personas que vengan se sientan cuidadas desde el primer momento, desde la gastronomía hasta el alojamiento en nuestro glamping", explicó.

 

La estación ha hecho un esfuerzo por adaptarse a las exigencias de este tipo de eventos, ampliando su oferta de alojamiento y mejorando sus instalaciones. Además de abrir el restaurante ‘Lobo’ y aumentar el número de camas disponibles,

 

 

Con el acuerdo con Zamna, La Pinilla apuesta por convertirse en un destino de ocio durante todo el año.

 

 

El próximo reto es consolidarse como un espacio musical de referencia, y el festival Zamna parece ser el aliado perfecto para lograrlo.

 

La estación también tiene en marcha proyectos de ampliación de su infraestructura, como la construcción de cabañas de lujo y la proyección de un hotel, lo que permitirá responder a la creciente demanda de alojamiento.

 

Estos avances son el resultado de una importante inversión por parte de los nuevos gestores, quienes asumieron el control de La Pinilla a principios de 2023 a través de una concesión pública.