A raíz del anuncio de la inversión en un telecabina desde Benasque a Cerler por parte del ayuntamiento de Benasque gracias a los fondos europeos, la Asociación de Vecinos y Amigos de Cerler "Pico Sarllé", recuerda al ayuntamiento de Benasque que el proyecto del telecabina sigue sin ir acompañado del necesario estudio de impacto económico y social para el pueblo que dio vida a la estación hace 5 décadas.

 A continuación, reproducimos el comunicado integro recibido en nota de prensa:

"Vamos a terminar el año 2021 celebrando el 50 aniversario de la estación de esquí de Cerler, fecha que coincide con la reciente información en la que el Ayuntamiento de Benasque, al que pertenece Cerler, ha hecho pública la “evidente necesidad” de construir con fondos europeos una telecabina que enlace directamente Benasque con las pistas. 

Lo que hay en realidad en Cerler es una “evidente preocupación” por un proyecto que requiere de un estudio de impacto económico y social para las muchas familias, trabajadores y empresas que llevan medio siglo arrimando el hombro para que el motor económico y de vida de todo el valle (la estación), siga creciendo, fijando población y creando trabajo. Sin embargo, a estas alturas, Cerler es el pueblo más abandonado del valle en cuanto a servicios, mantenimiento e inversiones públicas.

Cuando un grupo de inversores catalanes decidió en 1971 construir una estación de esquí fue el pueblo de Cerler y sus vecinos los que, con más generosidad, apostaron y colaboraron para que se materializara aquella idea que supuso un nuevo impulso y un desarrollo económico y social significativo no sólo para este pequeño pueblo del Pirineo, sino para el Valle entero y la Comarca. Pese a ello, hoy Cerler sigue siendo ignorado por las instituciones, echamos de menos apoyos, inversiones en servicios básicos mientras se miman otras zonas del Valle o del municipio. Podemos mencionar, solo como punto de partida, la deficiente carretera que tenemos, la inexistencia de un servicio decente de autobús, prioritario, antes de plantear megaproyectos de elevadísimo coste como el que se pretende construir.

Vista de la carretera de acceso a Cerler.

Esa es nuestra “evidente preocupación”. Hace un año, se solicitó al ayuntamiento un estudio sobre el impacto económico y social que la posible apertura de la telecabina podría tener en la vida de los habitantes de Cerler que heredaron la tradición de trabajo y esfuerzo de sus mayores y que siguen dando vida a Cerler y a su estación. Es un estudio imprescindible para medir las consecuencias de este proyecto y ponerlo en perspectiva con las interminables y graves deficiencias que sufrimos a diario como habitantes. Pero ese estudio no sólo no llega, ni siquiera se ha empezado. Otras gestiones, como la redacción del proyecto de la telecabina y la solicitud de una subvención a Europa, han corrido mejor suerte y sí se han hecho!

La opinión de quienes vivimos y trabajamos en Cerler también debería contar. La “evidente necesidad” de telecabina argüida por el regidor de Benasque por problemas puntuales de nieve en la A-2617 (obviando  descaradamente el problema de atascos que se producen en el pueblo de Benasque en las zonas de pasos de cebra junto a la farmacia, supermercados  y rotonda ), no se sostiene frente a la más que “evidente necesidad” de resolver, cuanto antes, el cruento abandono de un pueblo cuya población se ha esforzado durante 50 años para que Cerler sea hoy reconocido como uno de los mejores “resort” de esquí del país. Creemos que nuestra gente se merece un mínimo de consideración y respeto.  

La toma de decisión sobre un proyecto de tales dimensiones económicas no puede basarse exclusivamente en la existencia de un breve atasco en la carretera a Cerler en una fecha muy puntual. También debe considerarse el sano equilibrio de los servicios públicos, la calidad de vida en igualdad de condiciones de los vecinos, vivan donde vivan; deben existir argumentos sólidos y debe haber consenso para adoptar un criterio común entre los 3 núcleos que formamos el municipio: Benasque, Anciles y Cerler.

Con esta honda y más que “evidente preocupación” celebraremos los 50 años de una estación que nació en un pueblo que, en su día, lo dio todo y que hace muchos años dejó de recibir. Todo ello, a expensas de la calidad de vida de sus gentes que quieren y merecen que se cuente con ellas y que, al menos de vez en cuando, quieren ser consultadas sobre los problemas que le atañen directamente. Y mientras el alcalde de Benasque celebra que “con la llegada del dinero de Europa a Benasque le ha tocado la lotería” en Cerler seguiremos luchando para que las administraciones se acuerden de que seguimos siendo un pueblo con vida, con empresas y con futuro".
 

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