Asumido que no habrá esquí en todas las Navidades, principalmente a causa de la posición de fuerza de Francia, que ha amenazado a sus ciudadanos con sanciones si se van a esquiar al extranjero, los esfuerzos del Gobierno andorrano se centran ahora en conseguir visitantes que vayan a comprar o a relajarse en sus montañas.
 

La nieve cae este viernes en todas las estaciones de Andorra:
 

 

Los turistas galos son, por ahora, la única opción para la campaña de Navidad

Por un lado, se trata de asegurarse de que Francia, si la situación sanitaria no lo impide, permita restablecer la movilidad con Andorra a partir del 15 de este mes, dentro de dos martes, y al menos puedan llegar turistas a comprar y a hacer algunas actividades en el Principado.

Por otro lado, que Catalunya incluya el Principado en el Alt Urgell o en la región sanitaria del Alt Pirineu y Aran de forma temporal. Con ello, posibilitará no verse afectado por el confinamiento perimetral catalán. "Creo que es una cuestión de justicia y que en cierta forma permitiría atemperar esta decisión tan negativa para nosotros como lo es el hecho de que no pueda haber movilidad entre España y Andorra durante las fiestas de Navidad", ha explicado el jefe del Ejecutivo andorrano, Xavier Espot.

Espot y su equipo reconocen que el hecho de que Catalunya no pueda cambiar de tramo a partir del lunes y que España haya acordado un confinamiento perimetral para todas las autonomías del 23 de diciembre al 6 de enero, significa que "a estas alturas la movilidad entre Andorra y España durante las fiestas de Navidad, particularmente por motivos de ocio, no está ni mucho menos garantizada, más bien lo contrario".

Comunicado de Grandvalira y Ordino Arcalís: las 2 estaciones demoran la apertura hasta enero. Más info

Tras las últimas decisiones de España y Francia, Andorra teme que un "concierto europeo" deje más aislado el Principado en caso de no seguir las directrices globales, cuando para Francia cortar cualquier acceso con el Principado, y aún más en invierno, era de lo más sencillo.

 

El jefe de Gobierno ha hablado de "lealtad" y de múltiples factores y los contactos de las últimas horas han ido en la línea de intentar garantizar que, con la amenaza de las pistas abiertas ya parada del todo, Andorra pueda recibir ese turismo francés y español de compras de siempre.

Espot se aferra al equilibrio que "siempre hemos abogado" entre Francia y España, entre Ariège y Cataluña. "Y eso también refuerza que debería ser posible que Catalunya" permita la movilidad como lo hará Francia a partir del 15 de diciembre. Aún no hay nada decidido.