La estación de esquí de Valgrande Pajares abrirá parcialmente a partir de este sábado. Lo hará con el único telesilla de cuatro plazas que conecta la base con la cota más alta cerrado. El motivo, la inspección de dicho remonte, El Brañillín, que ha comenzado tarde porque se canceló su adjudicación.

 

 

Mientras, siguen los trabajos para tener listo el El Brañillín cuanto antes. Ayer se desmontó el cable y se extendió en el suelo y hoy debe tensarse, en una prueba que dura 48 horas. A partir de entonces, se podrá revisar el motor principal y el auxiliar, las pilonas, las poleas… Si todo funciona correctamente, hay que tener en cuenta que el telesilla tiene 30 años de antigüedad, se pondrá en marcha. Como muy pronto, será el 6 de diciembre, para el puente festivo de la Constitución.

 

 

Trabajadores y usuarios lamentan que, por una “cagada” burocrática, en un año que hay nieve Valgrande Pajares no pueda arrancar la temporada de esquí con normalidad y recuerdan que lo mismo sucedió en 2018-19 con el telesilla Valle del Sol, “aunque como no hubo nieve nadie se enteró”.