Masella despidió la temporada de esquí el pasado miércoles 1 de mayo. Pero ¿qué hacen un domingo 5 de mayo cerca de 50 vehículos en el aparcamiento de Coma Oriola de Masella? Pues muy sencillo: continuar esquiando. Os lo explicamos.

Diversos vehículos estacionados en Coma Oriola esta mañana de domingo (Foto: IST).

¿Por qué dejar de esquiar si todavía queda nieve en las pistas? Pues eso es lo que hacían ayer y hoy los ocupantes de los cerca de 50 vehículos estacionados en el aparcamiento de Coma Oriola, en Masella.

Este aparcamiento de la estación de esquí ceretana, situado en la cota 1.900, sigue siendo estos días una muy buena puerta de entrada para continuar disfrutando de la nieve de las cotas altas de la montaña de la Tosa (2.535 m).

Y es que aunque las pistas han cerrado, lo cierto es que la temporada de esquí aún no ha terminado. Nos referimos al esquí de montaña, por supuesto. O si lo preferís Skimo. O a las raquetas de nieve. Lo cierto es que cada mes de mayo son muchos los que aprovechan la nieve que queda en las pistas para continuar practicando el esquí de primavera por las pendientes nevadas de la cara norte de la Tosa.

Vehículos estacionados esta mañana de domingo en Coma Oriola, Masella (Foto: IST).

Ayer sábado y hoy domingo los trazados ya cerrados de Isards, Coma Oriola y La Tosa, pistas todas ellas bien conocidas de Masella, estaban siendo foqueadas por más de un centenar de esquiadores de montaña. A lo largo de toda la mañana, especialmente la pista Isards, ha estado frecuentada por excursionistas equipados con raquetas o esquís.

Las tres pistas mencionadas están situadas en su cota más baja por encima de los 1.900 m. Están encaradas a norte o poniente y por eso la nieve aún resistirá unos días más. De momento se puede salir deslizándose con esquís sobre la nieve desde las mismas escaleras de acceso entre el aparcamiento y la base del telesilla de este sector. Con el paso de los días, sin embargo, la lengua de nieve se irá reduciendo y quizás se deberán hacer unos metros caminando, pero eso no evitará que cada día decenas de esquiadores quieran continuar disfrutando de las últimas nieves esquiables y de fácil acceso de esta parte de los Pirineos.

Así pues, el sector de Coma Oriola como punto de salida, y con el aliciente de visitar el refugio del Niu del Àliga o disfrutar de las panorámicas que nos ofrece la cima de la Tosa seguirán siendo dos puntos de "peregrinación" para los esquiadores más incondicionales. ¿Alguien más se anima?

Paisaje de la Cerdanya al fondo y la pista Isards primer término frecuentada por esquiadores de montaña este sábado (Foto: IST).