Fue hace ya cinco años, en noviembre del 2013, cuando la Diputación de León y el Principado de Asturias firmaron el primer acuerdo (difundido a bombo y platillo) que debía servir para impulsar de forma conjunta las cuatro estaciones de esquí de ambos territorios. El convenio permitiría “la puesta en marcha de nuevos forfaits, de los que los usuarios ya podrán disfrutar en la temporada 2013/2014 y cuyo objetivo es comenzar a prestar servicios conjuntos que conviertan a esos espacios en el mayor dominio esquiable de la Cordillera Cantábrica”, se decía entonces desde ambas instituciones.

 

Apenas unos meses más tarde, el entente hace aguas. Y desde entonces vivimos anclados en el Día de la Marmota: primero se anuncia un acuerdo y luego queda en aguas de borrajas y vuelta a empezar. Y así hasta este mismo mes de abril de 2018. El 23 de abril publicamos la noticia de que 4 estaciones de esquí de la Cordillera Cantábrica podrían unirse con un forfait único el 2018-19. "Estamos 100% de acuerdo con la propuesta de León para unir bajo una gestión común las cuatro estaciones", declaró a este periódico el director general de Deporte del Principado, José Ramón Tuero. ¿Os suena?

 

 

Y ahora nos llega la noticia, publicada por el Diario de León, según la cual, “León frenará la fusión de estaciones si Asturias no paga la línea eléctrica”. El acuerdo estaba muy avanzado, al pie de la firma de un protocolo de actuación que León y Asturias, la Diputación y el Gobierno del Principado iban a celebrar esta misma semana. Ya no...

 

La Diputación de León exige que Asturias debe pagar, o comprometerse a abonar, al menos, la cantidad de 4,5 millones de euros que le corresponderían de la ejecución de la obra de la subestación eléctrica de Fuentes. El Principado ya ha avanzado que no tiene el dinero y que tampoco puede comprometerse a pagarlo a plazos.

 

Según avanza elcomercio.es, la contratación de la electricidad parece ser el único aspecto que genera tensión entre ambas provincias, aunque podrían existir otros problemas, como los medioambientales en el proyecto de fusión, ya que éste requiere, al menos, de la instalación de un nuevo remonte para unir la parte leonesa de Riopinos con la estación asturiana.

 

Esta vez ha sido León quien ha roto la baraja, pero aún hay tiempo y sólo la capacidad negociadora de ambas instituciones puede desencallar la unión de San Isidro, Leitariegos, Pajares y Fuentes de Invierno, una fusión que los usuarios empiezan a no creer.