Intenso fin de semana de sube y baja nocturno en el Río de Sierra Nevada
Subida de los corredores en la Ternua Snow Running celebrada en Sierra Nevada
Mon, 25/01/2016 - 00:29
Mientras unos subían corriendo otros bajaban esquiando en Sierra Nevada mientras se celebraba al alimón la inauguración de la actividad nocturna del esquí nocturno en la pista del Río y la Snow Running de Ternua en la estación granadina.
La estación invernal de Sierra Nevada añadía el pasado sábado 23 de enero la emblemática pista del Río a la temporada de esquí nocturno. Alrededor de 400 esquiadores disfrutaban de los 3,3 kilómetros esquiables y 600 m de desnivel que separan Borreguiles de Pradollano por primera vez en esta campaña.
El Río espera ahora que se le unan los 2,5 kilómetros de la Maribel en cuanto las condiciones de nieve lo permitan para extender su oferta de esquí nocturno hasta los casi 6 km que para lo que la estación ha mejorado la iluminación de las zonas con menos visibilidad nocturna.
La inauguración del Río para esquí nocturno coincidió con la celebración del V Ternua Snowrunning de Sierra Nevada en el que participaron unos 700 corredores. Así pues, mientras unos bajaban con sus esquís, otros subían corriendo mientras la noche se cernía sobre la estación granadina.
En esta prueba, se imponían el corredor granadino Javier Terrón del club Human Sapiens Runners y la jiennense Silvia Lara del Hockey Alcalá la Real. La prueba batió todos los récords de participación con corredores llegados de toda España.
Silvia y Javier se proclamaban a la vez como campeones de Andalucía de carrera a pie sobre nieve, una disciplina que se está imponiendo en las runnings de por montaña. La Ternua Snowrunning la organizaban el club Altalis y Cetursa Sierra Nevada contando también con el aval de la Federación Andaluza de Montaña.
El recorrido era de 12 km y un desnivel positivo acumulado de unos 900 metros. En el caso de las categorías cadete y juvenil, fue de 8 kilómetros. La carrera se desarrolló en unas perfectas condiciones gracias a la temperatura agradable que había en la estación, la extraordinaria visibilidad pese a ser nocturna y a la calidad del manto fruto del impecable trabajo de los maquinistas de Sierra Nevada.
Aún así, fue una prueba muy dura. Correr sobre la nieve desgasta mucho más que hacerlo sobre cualquier otra superficie por lo que se vivieron momentos muy emocionantes gracias al esfuerzo de los corredores que se mostraron muy satisfechos con el alto nivel de organización de la carrera y el inestimable trabajo de los voluntarios.