Después de 3 años seguidos viendo el FWT desde la comodidad del sofá me levanté este año y me fui a ver la vigésima edición del Xtreme Verbier, la que es la última prueba del campeonato del mundo de freeride y también la precursora del mismo, en directo. Todo empezó hace 20 años en Verbier cuando en 1996 se comenzó a desarrollar un campeonato meramente de Snowboard al que en el año 2004 se incluyó a los esquiadores para finalmente en 2008 adoptar el nombre actual “Freeride World Tour”. Debido a sus inicios y al Bec de Roses, una de las caras más importantes, si no la más importante, del mundo del freeride, conserva Verbier ese toque especial que ninguna otra parada del FWT posee. Así que nada mejor que este evento para adentrarme en el mundo de esta competición.

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Bec des Roses desde la zona reservada para el público

Pequeño Bec des Roses desde la zona del público.
Desde aquí partió la competición por las condiciones de nieve

Uno de los puntos de salida de la competición

En una de esas horas muertas de surfeo por la red me topé con una oferta muy interesante: 1 noche de Hotel con media pensión, forfait de dos días para todo el resort de Los 4 Valles, acceso gratuito a la fiesta oficial del FWT, descuentos en merchandising y un largo etcétera por el módico precio de 139€. Si tenemos en cuenta que el forfait en Verbier está a 71CHF (unos 68€) se puede decir que pagas por el forfait y el resto te sale gratis. Realmente Suiza es barata si sabes donde buscar y no te importa donde dormir...

En el pueblo de Verbier se puede ver como la nieve ya escasea a finales de Marzo

Denise rodeada de público durante la competición de esquí masculino

A las 8 de la mañana del sábado nos esperaba Audrey a los pies del telesilla Medran para explicarnos las características del evento. Después de comunicarnos a duras penas con su mal inglés (cosa que no comprendo en un evento como éste) y nuestro mal francés nos pusimos en marcha rumbo al Col des Gentianes donde se había establecido el punto de encuentro para el público.
 

Pantalla gigante en el Col des Gentianes

La competición fue genial. Ya verlo en casa es una pasada, pero verlo allí es insuperable. Hacía un sol radiante y el ambiente era magnífico. Cada vez que algún rider trataba de dejarse la vida en algún barranco el público vibraba y celebraba la hazaña con silbidos, aplausos y algún que otro suspiro de alivio. Cuando subes con el teleférico y ves el Bec des Roses a mano derecha te preguntas si serías capaz de bajar eso... este fin de semana había poca nieve y la cara se veía aún más complicada, casi más rocas que nieve. De ahí que la organización decidiera hacer la competición desde el pequeño Bec des Roses y no desde el grande. Después te sientas a ver como lo bajan los profesionales y te das cuenta de que aún te queda mucho camino por recorrer.

Vista de la pista negra que baja de Mont Fort

Antes de acabar la competición decidimos aprovechar la ventana de buen tiempo para descender unas pistas ya que luego iba a empeorar. Sobre la estación no tengo nada que decir que no se haya dicho ya en este fabuloso artículo de LdN. Los 4 Valles es una estación espectacular, hay oferta para todos los gustos y niveles sin excepción y tuve la suerte de probar unas de las mejores patatas fritas que he comido desde hace tiempo, en el bar Ice Cube de Les Ruinettes. Si vas no dejes de hacer una parada allí.

Mont Fort y Mont Gelé son dos paradas indispensables para todo esquiador con ganas de experiencias fuertes. Aún así no cometas el error de creer que porque son accesibles con telecabina van a ser bajadas sencillas. Todos los itinerarios de Verbier conllevan su riesgo y es mejor tratarlos como Big Mountain y extremar la precaución.

Estación vista desde lo alto del Mont Fort. Punto más alto de la estación a 3.329 m

Vistas desde Mont fort. En algún sitio tras las nubes debería verse el Mont Blanc

Vistas desde Mont fort. En algún sitio tras las nubes debería verse el Matterhorn

Pequeña pausa en la pista negra del Mont Fort

Itinerario de Mont Fort a Tortin. Largo, empinado y con bañeras

Después de dar las primeras vueltas por la estación volvimos al Col de Gentianes donde se estaba celebrando la entrega de premios. En nuestra ausencia se había organizado una gran fiesta y el ambiente era fantástico, sobre todo algún grupo de franceses que había bebido alguna copa de más. Abajo unas fotos no oficiales de la celebración.

Entrega de premios con el Bec des Roses detrás

Celebración esquí masculino

Aficionados franceses de celebración tras el evento

El ganador Aurelien Ducroz celebrándolo con amigos

Denise uniéndose a la fiesta

Cuando me dieron el título al más borracho

Ya sobre las cinco de la tarde nos bajamos al pueblo donde había un montón de puestos y tenderetes de las distintas marcas y patrocinadores. Una pantalla gigante se encargaba de amenizar la velada con vídeos sobre la historia del Xtreme Verbier mientras otros seguían a su rollo...

Equilibrismo entre casas en el pueblo de Verbier

Cuando llegamos al hotel nos dimos cuenta que The Bunker no era el nombre del mismo si no la palabra que lo define. Así que nos tocó pasar una noche en un búnker suizo de la época de la guerra situado en las instalaciones del centro deportivo de Verbier. Por lo visto este búnker fue en su momento el b&b de Verbier hasta que hace unos años el pueblo decidió cerrarlo y ahora se abre sólo para eventos especiales. La experiencia de dormir en un búnker es interesante. Y barata. Curioso me pareció que no tiene duchas. No quiero ni pensar como debe estar el ambiente allí dentro tras unos días de declarada la guerra. Las críticas de tripadvisor no son muy reales si sabes a donde vas.

Nuestras camas presidiarias en el búnker

Si te agobias en el búnker siempre puedes mirar por la ventana.

Tras cenar una raclette nos fuimos a la fiesta del FWT. Yo había esperado una fiesta ambientada en la competición con los riders y demás pero todo se quedó en una fiesta como otra cualquiera. Poca cosa. Así que no nos recogimos muy tarde (había que sumarle el cambio horario) y nos fuimos al búnker a dormir.

El domingo seguimos disfrutando de una estación semi-vacía. Y nos despedimos de Verbier por la tarde con una sonrisa de oreja a oreja. Sólo puedo recomendar esta estación que ha entrado en mi TOP5 y eso que todavía me queda mucho que probar allí dentro.

Recuerda que los itinerario no son tan sencillos como puede parecer.

 

No te olvides de consultar la fantástica crónica del compañero Sergi Yeti para ver como quedó esta vigésima edición del Xtreme Verbier

 

CONSEJOS

• Si te da igual el FWT ve a Verbier ese fin de semana por que encontrarás las pistas vacías.
• Para ver la competición lleva unos prismáticos y algo de picar.
• Sitúate cerca de los altavoces y/o las pantallas para poder enterarte de quien compite y cuando sale porque si no te perderás la mitad.
• Es primavera así que mejor despiértate pronto y aprovecha la nieve antes de que se convierta en agua.
• Es posible que coincida con el cambio horario así que perderás una hora de sueño... o de esquí.
• Si no te importa dormir en un búnker compra el paquete que compré yo. Ahorrarás dinero y tienes un montón de ventajas. Además la cena y el desayuno son suficientemente buenas. Eso sí, no te lleves muchas cosas de valor por si acaso.
• Si quieres disfrutar de verdad, contrata un guía y haz un día de freeride con él. Las posibilidades allí son infinitas.
• Si vas con coche, aparca en el parking Perin. Es gratuito las primeras 24 horas y un autobús te lleva a la estación cada 10 minutos. Otros parking cuestan hasta 20CHF al día.
• Pide unas Frites en el Ice Cube.
• Conéctalo con unos días en Chamonix y tendrás las vacaciones de esquí perfectas.
• Disfrútalo.